Friday, July 18, 2014

del día en que no me apetecía escribir, sin embargo escribí


6:30 am, no he dormido, me salí a convivir y buscar lo que en realidad no me interesa encontrar, pues solamente una es mi fiel compañera... la soledad. Aunque acostumbrada más no relajada, viajo sin rumbo alguno, beso bocas que tal vez no me interese besar dos veces, me reflejo en ojos que en realidad no me interesa reflejarme, ir y venir de contradicciones que solamente para mi tienen sentido.

Lagrimas que escapan pero que no mojan mi espíritu, mañanas con pajaros mudos que cantan al unisono de mi atención. Serena mañana que me deja saber que llego a mi hogar solitaria igual que siempre, entre claros que me recuerdan que solamente una vez se ama en la vida. estúpidos sentimientos renacentistas que se inclinan más al reconocimiento que al conocimiento.

Incapacidad de sublimar un sentimiento etéreo. máldito egoísmo que me hace desear más de lo que puedo tener, algo que tal vez una vez tuve, más no pudo permanecer cerca de mi, no por ganas de dejarle ir, sino más por ganas de dejar ir lo que nunca ha querido estar a mi lado. sentimientos frios y mundanos me rodean, tentando mis ansias, nublando mi criterio.

Palabras que no quiero que escapen se van de mí, pues carecen de sentido para los posibles receptores, jueces de lo injuzgable y al mismo tiempo, adoradores de mi debilidad, escazes de voluntad, liviandad en mi caminar, visicitud de mi desear.

Idioma es inverosimil, pues el sentir desconoce fronteras linguísticas. El líbido manifiesto en las más amplias singularidades del plural, en las más dilatadas pupilas escudriñadas por miradas traicioneras.

* Freiermond *